viernes, 26 de noviembre de 2010
La noche es el mar
Hace tiempo, viví tres años muy cerca del mar...
La noche es el mar esta noche,
de salitre y estaño.
Alarga los brazos y canta
con la voz de las cosas perdidas,
oscura y remota.
Talla mi cerebro en aristas brillantes.
Envuelve sus hombros en azul
como una mujer alta y solitaria,
y camina por la orilla de los rumores
con pasos de jirafa triste.
La noche es el mar.
Esta noche
hay que vendarse los oídos,
atarse a las ventanas,
porque las sirenas
han salido en busca de su alma
una vez más.
Merodean ondulando
cabellos sueltos y lamentos largos
que suben a secuestrar los sueños
y a seducir toda cordura
hasta llevarla enfebrecida al mar,
al mar que nunca descansa,
al mar
- ¡cuidado! -
esta noche.
miércoles, 24 de noviembre de 2010
Dí mi nombre
Manzano - G. Klimt |
Ésto era una vez, en un balcón, de madrugada,
una mujer que estaba enamorada y no podía dormir...
Quisiera defraudarte, amigo, sí.
Romper todas las imágenes que puedas tener de mí
para que entonces
ya
me puedas encontrar
toda tierna
toda blanca
toda yo
por fin.
Y como ya sé que el tiempo no es ilimitado
y que algún día moriremos,
no quiero irme sin haber acariciado tu cara
sin haberte besado despacio
sin que mis manos hayan vagabundeado por tu cuerpo
sin haber escuchado tu corazón.
Te abrazo
el tiempo no existe
ni el espacio
Te abrazo
con los ojos
con las piernas
con los brazos
pero sin atraparte, amor,
sólo con todo el presente.
Te miro
te veo
te reconozco,
yo sé que te reconozco.
Y tú me miras
me ves
me nombras,
qué gran respiro
qué descanso
cómo puede ser a la vez
tanto deseo y tanta paz.
Nos veo juntos
a la sombra de un gran manzano
que madura en torno a nosotros
y el aire,
todo el aire huele a manzanas
dulces, ácidas, crujientes.
Quiero defraudarte y luego
dí mi nombre, por favor.
dí mi nombre, por favor.
Dí mi nombre.
miércoles, 17 de noviembre de 2010
Viejo sol
En la chimenea apenas hormiguean las chispas entre las brasas.
Otro leño al fuego. Removerlo.
Las llamas bailan de nuevo, acercamos las manos.
Las llamas bailan de nuevo, acercamos las manos.
- ¿Te das cuenta? Nos está calentando el sol que antaño hizo crecer esta rama…
De pronto, una tarde redonda y antigua de agosto se ha colado en la sala.
martes, 16 de noviembre de 2010
El gran felino
Dios camina como un gran felino,
una presencia enorme y sigilosa
que merodea mis umbrales.
Dios se despereza y caen estrellas,
se mezclan con la tierra,
y de ella,
surgen surtidores
poderosos y oscuros.
Dios arquea el lomo y curva el universo.
Dios ruge y entre los ojos y la nuca
aparece el infinito anillo de fuego,
y entre el corazón y el ombligo
danza la Risa Madre saltando todos los abismos.
Arriba y abajo
se derrama energía líquida
desde los pies a las caderas
se derrama energía líquida
desde los pies a las caderas
mientras los brazos extendidos, horizontales
traspasan todas las barreras.
Temblor.
Un extático temblor orgásmico,
ondas que se propagan
y entretejen todos los centros que tiene el universo:
Dios ronronea.
lunes, 15 de noviembre de 2010
Presencia
Marc Chagall - Anochecer en la ventana |
Solo estar en silencio contigo
en silencio
pintando de blanco el tiempo
que se desliza como una gota lenta por el regazo de la suerte
por la redondez de la mejilla del milagro
En silencio
callados
sin ruido
descansando en el silencio
sin arrugar la lisura del espacio
sin gastar el aire
en diatribas ni en fórmulas ni en relatos ni en palabras de amor
En nada
Todo el aire
silente
vibrante
presente
Un solo aire en los dos
solo un solo aire
solo un silencio
Poesía del cuerpo
Gustav Klimt - Danae |
Poesía del cuerpo
porque entro y salgo, soy y doy.
Poesías de los brazos y el vientre,
del pelo y de las pecas.
Poesía de tocar y gustar,
tan antigua.
Poesía de la carne y de los huesos,
ya me jode tanta poesía del alma,
mi alma toda yo con uñas y con lengua
con vértebras y ojos
con olor y sabor
con peso y cicatrices
almacuerpo visible.
Ahora sé que soy libre para hablar.
Sin párpado
Mastico poesía
cristales en la boca
sangre revelada
Un ojo rojo o quizá una galaxia
mira desde el fondo de mis párpados
él sin párpado
Pasó un ángel blando cediendo nieblas
se aflojan los contornos
se silencia el mundo
No llores dragón verde
Iré a verte
Como la música
Como la música,
estas cosas que la razón no acaba de entender,
no acaba de explicar,
no acaba de amarrar.
Estas cosas que son libres y exactas a la vez como la música,
tan certera en el hueco del silencio.
Estas cosas que crean un lugar para vivir,
no solamente una línea para pensar.
No puedo comprender,
no puedo abarcar
lo que es mucho más grande que mi mente,
puedo y quiero
transitar por Ello
y bailar en Ello
y saborear su misterio
y sentir cómo la gratitud me llena.
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